El origen de Baños de la Encina se remonta a la Prehistoria. A este periodo pertenecen los yacimientos arqueológicos de la Cueva de los Canjorros de Peñarrubia, decorada con pinturas rupestres, el asentamiento de Peñalosa, datado en la Edad del Bronce (II milenio a.C.), y el yacimiento fenicio del "Cerro de Navamorquin", con restos de una mina fortificada.
LA ÉPOCA ISLÁMICA
Tras la invasión islámica, en el año 968 el califaal-Hakam II ordenó construir su fortaleza de Burch al-Hamma (Torre de los Baños). Algunos autores señalan que este castillo, junto a otros de semejantes características (amplios recintos de tapial dotados de puertas monumentales y epigrafía), fueron construidos en un periodo donde la estabilidad política de al-Andalus era incuestionable, y por tanto no protegían la integridad del Estado, sino que se edificaron en las inmediaciones de una importante vía de comunicación con el objetivo de servir de alojamiento temporal de todas aquellas tropas, fundamentalmente mercenarios norteafricanos, que se dirigían a la gran fortaleza de Gormaz para atacar los reinos cristianos del Norte.
LA CONQUISTA CRISTIANA
Conquistado por primera vez por Alfonso VII en 1147, no permaneció mucho tiempo bajo dominio cristiano, ya que el 12 de julio de 1212, tres días después de la Batalla de las Navas de Tolosa, pasó de nuevo a manos cristianas. Tras su conquista Baños fue entregado brevemente al Arzobispo de Toledo y a la Orden Militar de Santiago. No obstante, en 1225 Fernando III lo integra en el alfoz del Concejo de Baeza, en el que permaneció hasta que en 1626 obtuviera el título de villa.
Durante los conflictos nobiliarios de finales de la Edad Media este castillo fue protagonista de varios acontecimientos. En 1458 Enrique IV lo entregó en señorío al Condestable de CastillaD. Miguel Lucas de Iranzo, aunque los vecinos del lugar se resistieron al cambio de jurisdicción. En 1466, Ramón Corvera, regidor de Baeza, tomó el castillo y lo entregó a los partidarios del rey, ordenando el Condestable Iranzo a D. Pedro de Escavias que lo pertrechase y abasteciera.Fue ocupado por los ejércitos napoleónicos para controlar los pasos y el valle del Alto Guadalquivir. Hasta 1828 sirvió de cementerio parroquial, función que afectó a su estructura interna.
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